En el post de hoy te contamos paso a paso cómo se puede crear una estrategia de branding corporativo exitosa.
¡Empezamos!
¿Qué es el branding?
El branding es el proceso de definición, construcción y gestión de una marca.
Este procedimiento se lleva a cabo mediante la gestión organizada de la imagen e identidad corporativa, de los colores empresariales que se utilizan, así como del tono de voz que se usa en las comunicaciones empresariales.
Todos estos elementos influyen directamente en el valor de la marca. Contribuyen a que las personas asocien los productos o servicios que vende la empresa con recuerdos y emociones positivas.
Y de esta forma, la marca consigue posicionarse en la mente de su público objetivo como un referente en el sector.
En conclusión, el objetivo del branding es gestionar el proceso de una marca para que se coloque en la mente y los corazones de los consumidores.
Tipos de branding
Existen diferentes tipos de branding:
Branding personal: consiste en trabajar la marca personal de cada individuo.
Branding corporativo: consiste en trabajar la marca de una empresa. Este es el tipo de branding en el que nos vamos a centrar en el post.
Employer branding: consiste en trabajar la marca de un empleado.
Cobranding: consiste en juntar las estrategias de marca de dos empresas para crear una imagen más consistente en cada una de ellas.
¿Por qué es importante el branding corporativo?
La importancia del branding corporativo radica en que cada vez hay más competencia en el panorama empresarial y por ello es necesario que las compañías consigan diferenciarse.
Esto lo tienen muy claro empresas como Nike, Coca-Cola o Netflix. Saben que si quieren distinguirse de otras organizaciones que ofrecen productos o servicios similares a los que ofrecen ellas, tienen que trabajar muy bien su marca.
Si bien es cierto que todas ellas ofrecen productos increíbles, el poder de sus marcas ha conseguido despertar emociones positivas en la gente. Y esto es lo que hace que los consumidores prefieran adquirir sus productos antes que otros similares y más baratos.
Estas empresas han sabido crear una propuesta de valor única, brindar experiencias sensacionales, y han sido capaces de comunicarlas correctamente.
De esta manera, han logrado conquistar la mente y los corazones de su público objetivo.
Por lo tanto, el branding es un elemento imprescindible para cualquier empresa, ya que es la mejor forma de consolidar una marca mediante su reconocimiento y prestigio.
De esta forma, los consumidores acaban comprando por lo que es una marca, más que por lo que ofrece.
Pero, ¿qué es una marca?
Al contrario de lo que mucha gente piensa, una marca no es un simple logotipo. Más bien es un conjunto de sentimientos y experiencias que se generan en la gente a partir de la estrategia de branding que sigue una empresa.
La creación de este conjunto de emociones se consigue por aquellas compañías que tienen claros cuáles son sus valores y quiénes componen su público objetivo.
De esta forma, planifican todas sus acciones, desde el diseño de un producto hasta la promoción del mismo en los diferentes canales de comunicación, basándose en dichos valores y en lo que quiere su audiencia.
No obstante, cada persona puede entender el concepto de las marcas de forma diferente, ya que depende del contexto social, cultural y económico de cada una de ellas, y de las experiencias que ha tenido con la empresa.
Es por ello que para poder garantizar experiencias únicas a los clientes interesados en su marca, las empresas deben trabajar su branding en todo momento.
¿Cómo gestionar una marca?
Antes de nada, toda empresa debe tener claro cuáles son sus valores y cuál es su personalidad.
Es decir, debe tener claro cuál es su identidad corporativa. Aquella que va a guiar cada comunicación que lleve a cabo, independientemente del canal que utilice.
Así va a poder crear una estrategia de branding bien definida desde el principio y todos sus mensajes van a ser coherentes y claros.
Pasos para crear una estrategia de branding desde cero
Hay que comenzar diseñando un plan de marketing donde se especifique cuáles van a ser las acciones para dar a conocer la marca.
Para ello, es necesario tener en cuenta la personalidad, el tono de voz y el diseño de la marca, así como los canales de comunicación que se utilizarán.
Además, en la estrategia de branding intervienen los diferentes departamentos de la empresa, tanto el comercial, como el de diseño de producto, etc. Ya que todos deben estar alineados con la imagen de marca de la empresa.
Dicho esto, es necesario que antes de conocer los pasos de la estrategia de branding, tengas claro lo siguiente:
1. Debes definir quién es tu buyer persona
Piensa cómo es tu cliente ideal, es decir: qué características tiene, cuáles son sus problemas, sus inquietudes, sus deseos y sus necesidades. De esta forma, vas a poder orientar tu estrategia de manera correcta.
2. Debes conocer a tu competencia
Piensa quién compone tu competencia y cómo ha conseguido posicionarse en el mercado.
3. Debes marcar unos objetivos claros
Piensa unos objetivos SMART (específicos, medibles, alcanzables, realistas y temporales). En el marketing digital, todos ellos se plasman en métricas que van a ser indicativos del éxito (o fracaso) de la estrategia. Es decir, se plasman en KPIs (indicadores de rendimiento).
Por ejemplo, tu objetivo puede ser posicionarte de forma orgánica, es decir, aparecer entre los primeros resultados de búsqueda de Google, crear una gran comunidad en redes sociales, etc.
Para ello, vas a tener que basarte en métricas como las visitas a tu web, los clics, etc. Éstas te ayudarán a entender si estás cumpliendo tu meta o no y por qué.
4. Debes elegir los canales de comunicación adecuados
Una vez has definido cuál quieres que sea tu estrategia de branding, es hora de pensar en qué canales vas a querer tener presencia. Es decir, los canales a través de los que vas a hacer llegar tus mensajes a tu público objetivo.
Puede ser a través de medios tradicionales o digitales, como las redes sociales, el blog, la página web, etc. Lo más importante es que el canal que elijas sea aquél donde la audiencia tiene más presencia, porque si no estarás malgastando recursos y energía.
5. Debes medir todas las acciones que lleves a cabo
En el mundo digital es posible medir absolutamente todo lo que pasa en tus estrategias online. En cambio en el marketing tradicional no.
Así que si vas a llevar a cabo una estrategia de branding online, te recomendamos que midas cada paso que das. Te aseguramos que es la única forma de que entiendas si está funcionando o no tu estrategia y cuál puede ser el motivo de su fracaso o de su éxito.
De esta forma, vas a poder tomar las riendas en el asunto y optimizar las acciones y tareas que estés llevando a cabo.
A continuación te contamos cuáles son los pasos para crear una estrategia de branding exitosa:
1. Crea una propuesta de valor propia
Piensa en el “porqué” de tu marca. Es decir, piensa porqué estás creando tu marca. Cuál va ser la razón de su existencia.
Puede ser estatus, bienestar, salud, exclusividad, originalidad, aventura, solidaridad, sostenibilidad. Es decir, ese objetivo profundo que te lleva a crear un producto o servicio para plasmarlo.
Por lo tanto, la propuesta de valor es la razón de existir de tu marca.
En esta fase es muy importante que pienses qué es lo que querían hacer los fundadores cuando crearon el negocio.
En el caso de ThePowerMBA tenemos muy claro que lo que mueve a la empresa desde el principio es la idea de democratizar la educación.
Y esta idea es la que se ha plasmado en cada estrategia de branding. Es la que nos ha ayudado a transmitir cada mensaje a nuestro público objetivo.
A menudo esta propuesta se convierte en una frase que se acaba asociando con la marca. Y se acaba convirtiendo en el eslogan de la empresa.
Otro ejemplo interesante es el de Airbnb. Su propósito es ayudar a la gente a que entienda que puede pertenecer a cualquier lugar del mundo.
De esta forma, Douglas John Atkin, uno de los creadores de la marca de Airbnb, dice que para comprender cuál es el universo detrás de una marca, es de mucha utilidad mantener conversaciones con los consumidores y colaboradores.
"Para comprender cuál es el universo detrás de una marca, es de mucha utilidad mantener conversaciones con los consumidores y colaboradores."
Douglas John Atkin (uno de los creadores de la marca de Airbnb)
Te ayuda a comprender por qué creen en la empresa. Te ayuda a entender cuál es el verdadero propósito de la empresa.
Así que antes de crear una historia alrededor de tu marca, escucha con mucha atención a la gente que hay alrededor de ella.
2. Define cómo vas a plasmar tu propósito. Define la promesa de tu marca.
Una vez tengas claro por qué quieres crear tu empresa, piensa bien cómo vas a conseguir ese propósito.
Es decir, analiza qué producto o servicio puede adaptarse a tu propuesta de valor.
En nuestro caso, tras analizar el nicho de la educación, nos dimos cuenta de que no había nadie ofreciendo una propuesta innovadora (cosa que sí ocurría en muchos otros sectores).
También nos dimos cuenta de que no todo el mundo podía acceder a una formación de negocios completa y de calidad si no pagaba una cantidad desmesurada de dinero.
Así fue como descubrimos que era necesario democratizar la educación. Es decir: ofrecer formación de muchísima calidad a un precio asequible. Y esto era posible gracias a un máster online no oficial.
Otro ejemplo sería el de Nike. Nike cree que puede convertir a cualquier persona en un atleta. Además, piensa que es posible hacerlo en un mundo más sostenible. Y esto lo consigue gracias a sus productos deportivos.
3. Ahora toca pensar en los atributos de tu marca…
Cuando hayas decidido cuál es el propósito y la promesa de tu marca, toca pensar en cómo vas a transmitir esa propuesta de valor a tu público objetivo.
Es decir, cómo vas a conseguir que la gente se enamore de tu marca.
Para ello, piensa bien cuál va a ser la personalidad de tu empresa. Es decir, cuál va a ser su tono de voz, su imagen corporativa, su diseño, los canales de comunicación en los que se centrará, etc.
4. …Esto te servirá para posicionarte
Gracias al estudio del propósito, de la promesa y de los atributos de tu marca, vas a poder posicionarla en el mercado.
Es necesario que pienses en cuáles son tus objetivos comerciales y en el valor que va a ofrecer tu producto o servicio.
En el caso de ThePowerMBA nos hemos querido posicionar como una empresa disruptiva e innovadora. La gente más inquieta y los “early adopters” fueron los primeros en animarse con nuestra propuesta.
Pero poco a poco, se fue animando más gente. Y a día de hoy podemos decir que ya contamos con más de 60.000 alumnos en más de 90 países alrededor del mundo.
Al principio sabíamos que teníamos que crear una imagen innovadora en torno a la marca para que la gente se animara con una propuesta tan novedosa. Y luego si todo iba bien, sería cuestión de tiempo que más gente se animara.
Actualmente con el nacimiento de propuestas similares a la nuestra, nuestro posicionamiento se sigue centrando en la innovación, pero también en la diferenciación.
Por lo tanto, debes centrarte en aquel aspecto que diferencia a tu empresa de otras. Por ejemplo, en la seguridad, la experiencia del usuario o en aquello que consideres único de tu negocio.
En conclusión, posicionar significa entender lo que tu público objetivo necesita en cada momento para inclinarse por tu empresa y no por otra.
5. Trabaja la identidad corporativa
La identidad de tu marca tiene que ser consistente y estar consolidada.
De esta forma, puedes conseguir que sea fácilmente reconocible. El color que utilices o un simple icono va a ser suficiente para que la gente asocie tu marca con esos elementos.
Para ello, es fundamental que crees un universo en torno a tu marca. Que cada mensaje que transmitas sea coherente con la personalidad de la empresa.
Esta es la única forma de conseguir que la gente identifique a la marca con cada comunicación que hace y la asocie con ciertos valores, ideas, emociones, recuerdos, etc.
Para lograrlo, es muy importante crear una guía de estilo que deje claro cuál es el tono de voz de la empresa, qué colores se utilizan, etc.
A continuación te ponemos el ejemplo de ThePowerMBA para que comprendas a la perfección a qué nos referimos con consistencia de la marca:
Cada elemento de su estrategias de branding está pensada para transmitir una imagen coherente con la marca. De esta forma, en las redes sociales utiliza las siguientes imágenes:
6. Crea una imagen corporativa fácilmente distinguible
Con esto nos estamos refiriendo a la representación gráfica de la marca, es decir, a todas las cuestiones estéticas (como el diseño, los colores, la tipografía, etc.).
Las representaciones gráficas de la empresa pueden ser:
El logotipo: es el nombre que representa a la empresa (que suele ser distinto al nombre jurídico) y que refleja su personalidad. Está compuesto únicamente por letras (y a veces números, como 7Eleven), y ayuda a que los consumidores puedan identificar una marca nada más verla. Para ello, es fundamental que detrás ya exista una marca consistente. Algunos ejemplos de ello son el logotipo de Google o Disney.
El isotipo: es la representación gráfica de una marca. Algunos ejemplos de isotipos son la manzana de Apple o el tic de Nike.
Imagotipo: es la conjunción de un logotipo y un isotipo. Pero pueden separarse sin que ello afecte a la representación de la marca. Algunos ejemplos de ello son YouTube o Carrefour.
Isologo: es la representación de la marca mediante un texto y una imagen. A diferencia del imagotipo, en este caso no puede separarse la imagen del texto. Algunos ejemplos de ello son Fanta o Burger King.
Por lo general las empresas tienen un isotipo y un logotipo. Pero en ocasiones tienen una mezcla de ambos, a través de un imagotipo.
Por otra parte, para transmitir todos los mensajes de la marca, cada una escoge una tipografía concreta que esté alineada con su personalidad. Si eres una empresa más desenfadada, la tipografía será diferente a la de una empresa más seria.
En general las marcas tienen tipografías primarias y secundarias:
Las primarias son las letras más conocidas. Suelen ser las que usan en el logo.
Las secundarias o de apoyo son las letras que se utilizan en otras comunicaciones, como en las campañas de marketing o en las redes sociales.
Coca-Cola no utiliza su tipografía primaria en todas sus comunicaciones. En esta imagen puedes ver cómo utiliza la tipografía secundaria en sus redes sociales.
Además, la empresa también escoge los colores que definen la imagen de la marca. De esta forma, se puede atraer la atención de los consumidores, otorgar personalidad a la marca y diferenciarla de otros productos.
Si has oído hablar de la psicología de los colores, sabrás que cada color evoca una idea y provoca diferentes emociones. Por ello, al elegir los colores corporativos, piensa en cuáles son los atributos de tu marca y qué colores los representarán mejor.
Este es un trabajo constante que no se consigue de la noche a la mañana. Es necesario ser consistentes y que en cada comunicación o estrategia se utilice la misma gama de colores.
Por ejemplo, Coca-Cola se identifica con el color rojo y Starbucks con el color verde.
También es importante que tengas claro cuál es la imagen que transmite tu marca. Puede ser que se base en imágenes más realistas, en figuras geométricas o en dibujos de un estilo concreto.
7. Crea el eslogan de tu marca. Asegúrate de que sea impactante.
La imagen no lo es todo en una estrategia de branding. Para poder sacarle el máximo partido, es necesario que se complemente con textos persuasivos.
El poder de las palabras es indiscutible. Y por ello, es muy importante trabajar el copywriting.
De hecho, algunas marcas lo hacen tan bien que consiguen ser recordadas por sus lemas. Por ejemplo, Nike y su eslogan “Just Do it” o McDonalds con su eslogan “I´m loving it”.
Generalmente se opta por establecer eslóganes como apoyo del logotipo de la marca y en estrategias de marketing concretas.
Algunos eslóganes sobreviven siempre, pero otros van cambiando en función del posicionamiento de la empresa.
8. Define cuál es el tono de voz de tu marca
Todo lo citado anteriormente te va a ayudar a crear una identidad corporativa sólida. Pero además, es fundamental que la marca tenga una voz propia.
Para ello, una vez sepas quién es tu buyer persona y cuáles son los atributos de tu marca, piensa bien cuál va a ser el tono de voz con el que vas a conectar más con tu público objetivo.
Por ejemplo, en ThePowerMBA utilizamos un tono de voz cercano y desenfadado. A pesar de ser una escuela de negocios, nuestro público objetivo se compone de gente inquieta que se anima con propuestas innovadoras.
Por ello, a diferencia de lo que hacen casi todas las escuelas de negocio, en nuestro caso no hemos querido tener un tono serio, sino todo lo contrario: un tono gracioso y cercano.
Esto nos caracteriza y nos diferencia de la competencia.
No obstante, aunque tu voz siempre sea la misma, el tono puede cambiar en función de los canales y las audiencias. En nuestro caso, no utilizamos el mismo tono en LinkedIn, en Instagram y en el blog. En cada caso, lo adaptamos al canal y a la audiencia.
Pero lo fundamental es que en todo momento el tono de voz guarde consistencia. Esto junto con la representación gráfica va a formar la personalidad de tu marca.
9. Ten siempre en mente la idea de generar emociones en tu público
Seguro que más de una vez has oído esta frase: “los recuerdos se olvidan, pero las emociones permanecen”.
Está comprobado que el 95% de las compras son emocionales. Es decir, que aunque creamos que compramos de forma racional, la realidad es que siempre hay un deseo más profundo.
Puede ser que te creas que te compras un coche de lujo porque lo has pensado bien y te compensa. Pero la realidad es que lo compras por el deseo de mostrar estatus.
Lo mismo pasa con los relojes caros. La gente los compra para demostrar su poder y mostrar estatus.
Por lo tanto, no se compra con la cabeza, sino con las emociones.
Esto es lo que tienen que entender las marcas. Que la gente compra de forma inconsciente.
Aquellas empresas que lo entienden, son capaces de llegar a las mentes y los corazones de los consumidores, y finalmente consiguen triunfar.
Un buen ejemplo de ello es Harley Davidson. Sus motos son más caras, pero la gente está dispuesta a comprarlas porque la empresa ha sabido apelar a las emociones.
No vende solamente motocicletas, sino que vende un estilo de vida donde sus clientes pueden ser aventureros. Les ofrece la sensación de libertad.
A continuación te dejamos un anuncio de Harley Davidson que te va a ayudar a entender cómo consigue llegar a los corazones de sus clientes:
https://www.youtube.com/watch?v=2SfkqaKnScE&ab_channel=TheJack2903
En conclusión, encuentra la manera de conectar con tu público objetivo a nivel emocional.
10. La flexibilidad es indispensable en cualquier estrategia de branding
Vivimos en un mundo que cambia constantemente. Por ello, los profesionales del marketing tienen que ser flexibles y saber adaptarse a los cambios rápidamente. Tienen que saber hacer rebranding.
Esto no significa que tu marca vaya a dejar de ser consistente. Simplemente que partiendo de su identidad corporativa, se va a adaptar a los tiempos. De otra forma, probablemente no consiga sobrevivir.
Por lo tanto, no tengas miedo a los cambios. Que algo haya funcionado en el pasado, no significa que lo vaya a hacer ahora.
Para que entiendas mejor este concepto, a continuación te ponemos algunos ejemplos de flexibilidad en las estrategias de branding:
McDonald´s: realizó un cambio en su imagen empresarial. En la década de 1990 y principios de la década de los 2000, se convirtió en una cadena de comida basura. No quería tener esa imagen. Por ello, invirtió en rebranding. De esta manera, su color cambió al verde y pasó a ofrecer alimentos más saludables. Así es como pretende ganarse una imagen de un restaurante de mayor calidad.
Apple: cuando Steve Jobs se hizo cargo de la compañía en 1997, convirtió la marca en una minimalista y moderna. Se centró en ofrecer experiencias, más que productos. Además, cambió su nombre de Apple Computer a Apple. Y así logró aumentar su cuota de mercado. Por otra parte, determinó su target a través de su eslogan “Think Different”.
11. Incentiva la participación de todos los empleados
Para lograr la consistencia en la empresa, es necesario que crees una guía de estilo para todos los empleados.
De esta forma, estarán alineados con la estrategia de branding de la empresa, y la imagen será más consistente.
Por lo tanto, si tu marca es más desenfadada en las redes sociales, los comerciales tienen que actuar de la misma forma. No sería coherente si fueran serios y aburridos.
12. No te olvides de la lealtad a los clientes
Con esto queremos decir que una vez has trabajado el branding y los clientes te han elegido, es fundamental que recompenses su elección.
Los consumidores han dedicado parte de su tiempo para escribir sobre ti, para recomendar tus productos a sus amigos y para ser embajadores de tu marca. Y esto merece un premio.
Puedes publicar un sorteo, ofrecer descuentos, organizar un evento, etc. Piensa en algo que sirva como recompensa para tus clientes.
De esta forma, vas a poder forjar con ellos una relación duradera en el tiempo. Y esto se va a traducir en más ganancias para tu empresa.
En conclusión, la estrategia de branding te va a ayudar a conectar con tu público objetivo hasta tal punto que decida elegir a tu empresa frente a la competencia una y otra vez.
Trabájala bien y verás cómo todo el esfuerzo se va a traducir en beneficios para la compañía.
Cuéntanos, ¿crees que la estrategia de branding es fundamental para cualquier negocio?
Te leemos en los comentarios ????.
¿Bucas algo en concreto?
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