Tendencias por aquí, tendencias por allá… No hay nada que se escape de las manos de un Coolhunter. 

¿Sabías que cada año la compañía Pantone expone cuál será el color de moda y eso marca tendencia en múltiples sectores durante meses?

Y es que, lo creas o no, todos hemos sentido esa pasión por el Coolhunting, sí, aunque no sepas ni lo que significa (de momento).

Un Coolhunter es el término que usamos los marketinianos para referirnos a un cazador de tendencias, a esas personas que trabajan haciendo predicciones sobre las próximas tendencias de un sector, ya sea el marketing digital, el consumo, las nuevas tecnologías, el diseño… 

Y lo cierto es que esta información se ha convertido en algo FUNDAMENTAL para las marcas. Al fin y al cabo, un Coolhunter les permite estar a la última y llegar al máximo de consumidores posibles.

¿Quieres saber todo sobre un Coolhunter? ¡Sigue leyendo!

¿Qué es el Coolhunting? 

El Coolhunting es un término relativamente nuevo que nació en 1997 de la mano del periodista Malcolm Gladwell, gracias a un artículo publicado en The New Yorker. 

Para que comprendamos mejor el término quizá debamos analizar antes el significado de las dos palabras que lo componen, «cool» y «hunting». 

Así que podríamos definir a todo lo cool como novedoso, atractivo, inspirador y expansivo. Y hunting significa cacería en inglés. Así que el coolhunting es la cacería de todo lo que es cool. 

Lo que podría ser un trabajo meramente de calle o de forma virtual. Porque de cara al marketing, ya hay especializaciones y formaciones referentes al tema. 

¡Puedes ser un Coolhunter profesional! 

¿En qué consiste el Coolhunting? 

Un Coolhunter tiene el enfoque de poder investigar las tendencias de los mercados y el comportamiento de las personas, solo así las empresas y negocios pueden saber qué es lo que necesita su público objetivo.

Y cómo crear el producto o servicio que satisfaga esas necesidades. Entonces, el trabajo de un Coolhunter consiste, más allá de saber qué tendencias son cool o no, en saber cuál es la raíz de las mismas. 

Solo así podrá saber qué soluciones son las más idóneas para las empresas. 

En sus primeros años la profesión no era tan tomada en serio ya que mucha gente se denominaba Coolhunter, pero al final, no eran capaces de analizar las metodologías que había detrás de las tendencias; lo que les llevaba a la incapacidad de proponer soluciones nuevas. 

¿Qué hace un Coolhunter?  

El trabajo principal de un Coolhunter es investigar, a través de herramientas y métodos que le faciliten la recolección de datos que pueda analizar y que sirvan como señales cool. 

Podría apoyarse en métodos tradicionales como encuestas directas o vía mailing. Y tiene mucho trabajo de campo, digamos que es un profesional que tiene la libertad de escoger de qué manera hacer sus investigaciones. 

Si lo ve necesario, podría salir a las calles a buscar tendencias y señales. Lo que realmente importa en este punto es que pueda encontrar señales que den pie a sus investigaciones. 

¿Y cómo saber cuándo es una señal? El objeto o actitud en estudio debe tener la capacidad de tener influencia sobre el inconsciente colectivo. 

Cuando ya tienen todas las señales el Coolhunter debe analizar los patrones de comportamiento que lleven a la gente a actuar de determinada forma respecto a ellas,

Solo así podría proponer nuevos insights a la empresa para la que trabaje. 

No solo en el marketing existe el Coolhunter, también lo verás en el mundo de la moda, el sector alimenticio y de la cosmética, entre otros.

Pero tiene un papel muy importante en el sector tecnológico, y todo se debe a que los productos de esta índole evolucionan con el consumidor. 

A diferencia del mercado alimenticio, por ejemplo, el tecnológico debe proponer nuevos problemas a sus usuarios para dar así una solución inmediata. 

Pero lo curioso del caso es el tipo de problema que se propone en algunos productos. Por ejemplo, Apple con cada modelo que saca hace una breve variación de sus cámaras, lo que podría no ser un problema real para algunas personas, para sus consumidores, sí lo es. 

¿Por qué convertirte en un Coolhunter? 

Si estás por convertirte en un Coolhunter profesional para gestionar tu propio negocio, quizá te interese saber esta información. 

• Los costes para utilizar softwares de investigación no son altos. 

• Podrás transmitir tu mensaje innovador a una cantidad mayor de potenciales clientes. 

• Podrás convertir una tendencia en una nueva forma de plantear tus productos o servicios. 

• Analizarás a fondo cuáles son los comportamientos de un público en general que le llevan a actuar de determinada forma en relación a un producto o servicio de tu competencia. 

• Podrás sacar un provecho económico de donde los demás solo ven moda. 

• Podrás personalizar aún mejor productos o servicios que ya tienes en tus manos. 

• Harás que las tendencias de tu negocio coincidan con las tendencias a nivel global. 

• Serás líder en tu sector, no solo por ser de los pocos que utilizan el Coolhunting, sino que podrás posicionarte como experto en la materia.  

¿A punto de transformarte en un Coolhunter? 

Admítelo, también has fantaseado unos minutos con volcar todos tus talentos en el Coolhunting. 

Y es que, aunque parezca una carrera poco conocida, lo cierto es que hay formaciones académicas y de nivel superior que la imparten. 

También podrías acelerar el proceso de aprendizaje con otras formaciones que van directo al grano, que se hacen en poco tiempo y a tu ritmo. 

Esta especialización también la puedes obtener a través de un postgrado, por lo que si tienes conocimientos en marketing, diseño o áreas creativas, quizá cumplas con el perfil para aspirar a ella. 

¿Qué otras ventajas ves en convertirte en Coolhunter? Háznoslo saber en comentarios..